Siempre
me ha gustado el cine. No soy un fan adicto a un director en concreto aunque
tengo mis predilecciones así como mis fobias, pero sí que me gusta ir al cine,
con todo lo que ello implica. No suelo comer palomitas aunque de vez en cuando
tampoco sientan mal, dependiendo de la película. Lo que me gusta sobre todo es
la liturgia de llegar, coger las entradas, sentarme en la sala y ver los
tráileres; al terminar, quedarme hasta el final y salir tranquilamente
comentando la película si es que no la vi solo.
El
caso es que cuando estuve en Inglaterra apenas fui al cine pero aquí sí que
suelo ir una o dos veces al mes, a pesar de que el precio es bastante alto
(dependiendo de la sala, la zona y la película anda entre unos 1000 y 2000
yenes). De hecho, esta entrada viene a cuento de que hace poco fui a ver
Ironman 3 y resulta que la única película que fui a ver en Inglaterra fue
Ironman 2, y obviamente vi Ironman 1 en España. Así que esta trilogía, aparte
de gustarme, empieza a tener un especial significado para mí.
Por
supuesto, voy a sesiones en versión original subtitulada, evidentemente en
japonés. Por suerte, aquí no suelen doblar las películas, así que normalmente
tengo una buena variedad donde escoger. Como anécdota graciosa, cuando fui a
ver Ironman 2 en Inglaterra lo hice a una versión para gente con problemas de
audición porque ponían subtítulos en inglés… lo sé, lo sé, se supone que tenía
que entender la película sin necesidad de subtítulos, pero es lo que hay. Ahora,
aunque estoy en Japón, casi entiendo más inglés que antes. También fui a ver
una película de animación en japonés, con lo que no entendí nada, por supuesto,
pero había que hacer la tontería de turno y más siendo una película de los
estudios Ghibli.
Bueno,
que me voy por las ramas, como siempre, y esta parrafada no interesa a nadie.
Japón es diferente en muchos aspectos, como es obvio y todos nos imaginamos por
lo que nos suele llegar a Europa. Los programas de televisión así como los
anuncios no son una excepción. Ejemplos de anuncios en televisión o programas
chorras (quién no recuerda “Humor amarillo”) los podéis encontrar en Youtube. Lo
que no sé si es tan fácil de encontrar es lo siguiente.
No
creo que haga falta mucha traducción. Este anuncio lo suelen poner antes de las
películas, o más bien solían poner, porque éste era el del año pasado, ahora es
un poco diferente y me hace menos gracia.
Hoy
entrada corta pero con vídeo, que compensa.
Besos
para ellas y abrazos para ellos.