domingo, 19 de junio de 2011

...da un salto de fe

En primer lugar, tengo que seguir dando las gracias. Tal vez esté un poco pesado, pero me veo en la obligación de agradecer a todos vuestras palabras de apoyo estos días. Tal vez esté haciendo un mundo de todo esto, pero es que volver a marchar me está resultando mucho más duro de lo que pensaba. Ya sé que esta es una gran oportunidad para conocer otra cultura, para mejorar profesional y personalmente. Sin embargo, también es volver a empezar de cero con todo: en el país, en la ciudad, en el trabajo, con los conocidos que tal vez algún día se conviertan en amigos, el piso donde no tengo ni nevera…

Aquellos de los que estáis leyendo estas líneas y habéis marchado a un país diferente sin conocer a nadie, sabéis bien de lo que hablo. Otros habéis hecho estancias cortas y la sensación es parecida. Para aquellos que no lo habéis hecho nunca tal vez este ejemplo os valga: Cuando uno se va de vacaciones, a veces (no siempre) es reconfortante regresar a casa, a la rutina diaria, uno está deseando volver a todo ello ya que de vacaciones uno no está realmente en su ambiente, no encuentra las cosas, no sabe dónde ir. En el caso de irse fuera, uno no está en su ambiente nunca, aunque a la larga se puede hacer con el sitio, pero para llegar a ese punto hace falta mucho.

En fin… voy a dejar esto, porque sé que no me lleva a ningún sitio y además me van a caer unas cuantas bofetadas virtuales a ver si espabilo.

En esta entrada quería hablaros de cómo están siendo estos primeros días por Japón, y lo que mejor lo define es dar un salto de fe. Como os podéis imaginar, los primeros días en otro país son de papeleo. Uno necesita hacer de todo, papeles del contrato de trabajo, contrato de renta de apartamento, papeles en la oficina de inmigración, papeles en el banco… Y sí, quitando un par de los de inmigración, los demás se encuentran todos en japonés, y la gente que los expide no sabe hablar en inglés, así que tengo que ir con un chico que está en el laboratorio donde estoy trabajando, el cual tampoco habla muy bien inglés, y tengo que fiarme de lo que me dice cuando firmo un papel. Así que estoy dando tantos saltos de fe que parezco Yago Lamela… huy, esto no, que no es muy correcto en estos días. En fin, que tengo que confiar en que no me están engañando y en una de estas firmo mi sentencia de muerte o algo así. Por el momento, las cosas van saliendo poco a poco aunque uno se va encontrando con ciertos obstáculos. Por ejemplo, pude abrir una cuenta en el banco pero resulta que no me dejan hacer transferencias internacionales durante los primeros seis meses, ni siquiera para ingresarles dinero. Según me han dicho, es porque muchos inmigrantes vienen y se dedican a enviar mucho dinero fuera lo que no es bueno para la economía japonesa. Esto lo puedo entender hasta cierto punto, pero lo que no entiendo es que no me dejen traer dinero al país, que se supone que es bueno para ellos. Debido a que mi beca es española y me pagan allí, me interesaba hacer transferencias, así que me han fastidiado. Por otro lado, creo que no tendré problema en conseguir una tarjeta de débito, pero al chico español que está en el mismo laboratorio no le han dejado sacar una tarjeta de crédito. No le dieron ninguna explicación y eso que él tiene nómina japonesa, así que la única “razón” posible es porque es extranjero. Tengo que decir que los japoneses son muy amables, se desviven por ayudar, en mi caso, el chico del que hablaba antes me está ayudando con todo, llevándome de un sitio para otro con su coche. Sin embargo, uno se tropieza con ciertas actitudes y reglas un tanto discriminatorias con los extranjeros. Por ejemplo, el piso que me gustaba a mí no me lo alquilaron por ser extranjero.

Otra de las cosas que tuve y tengo que hacer estos días es ir comprándome cosas para el apartamento donde estoy viviendo. Aquí los apartamentos se alquilan normalmente vacíos, lo que quiere decir que no tenía nevera ni lavadora y tampoco una cama. Así que encontré bastante triste que lo primero que tuve que hacer fue comprarme algo para dormir. Pero antes de seguir con esto, aquí os pongo el plano del piso que alquilé.

En total tiene unos 33 metros cuadrados, lo cual no está mal aunque no me gusta mucho la distribución. Ahora sólo tengo que amueblarlo. De momento, os pongo una foto del piso.

La panorámica no es muy buena, lo sé, pero no tuve ganas de hacer otra. Ya veis que ni había deshecho las maletas, de lo cual se podría hablar en otro momento, de cómo se hace una maleta para año y medio. Bueno, en realidad es casi lo mismo que para una semana.

Como veis, no hay mucho en la casa, lo único que tengo ahora es el futón que está metido en las bolsas blancas. No creo que compre muchas cosas más (a parte de una nevera y una lavadora), pero más adelante ya volveré a hablar sobre el piso cuando tenga algo más.

Por cierto, ayer viví por primera vez un terremoto. Fue de aproximadamente 4-5 en escala Richter y duró unos 10-15 segundos, lo cual es casi apenas un pequeño meneo aquí. Algunas estanterías se movían y se notaba la vibración. Supongo que también acabaré acostumbrándome a esto, pero para ser el primero que vivo, ya me sirvió de contacto. Menos mal que no soy aprensivo porque si no, hubiera salido corriendo del edificio.

También quiero decir que he vuelto a cambiar un poco el diseño del blog, a ver si ahora gusta un poco más a los que les cansaba la vista.

Una entrada con un poco de todo, pero es que si no lo hago así, no me da tiempo a escribir sobre cada cosa diferente.

Besos para ellas y abrazos para ellos.

8 comentarios:

  1. ¡Ah, sí, esto es otra cosa!
    Muy gentil de tu parte Albertico; gracias por cambiar el fondo.

    Muy apropiado el título de la entrada de hoy...
    ...y aquí va la primera colleja virtual: ya está bien de ver la botella medio vacía.

    Cierto, es duro cambiar de vida, no conocer a nadie, etc... pero piensa que eres un inmigrante de LUJO, (creo que ya te lo dije en la anterior etapa) ¿o cres que sería más fácil si fueras un "ilegal"? (nótense las comillas)
    ¡Ánimo y a vivir que son "cuatro birras"! (plagiando sin pudor un anuncio cervecero).

    Besicos faticos a porrillo.

    ResponderEliminar
  2. Nunca se tiene lo que se quiere (¿era así?).

    Me uno a mi madre en darte las gracias por aclarar el fondo. Ahora se lee mucho mejor.

    El piso es más grande que el de muchos personajes de anime, y más grande de lo que yo me pensaba. La casa que yo me planteé hacer tenía poco más por planta.

    Lo dicho, lo importante ya está hecho. Tienes dónde dormir, donde comer y donde trabajar. El resto es lo de menos.

    Kambareé sempai!

    ResponderEliminar
  3. Ya tenía ganas de una entradilla!!!!

    Empieza a disfrutar de la experiencia!! Mira que te mando otra colleja virtual, eh? Una vez me dijo (más bien me escribió) un buen amigo que siempre se ve más verde el prado ajeno, pero no se ven los topos. jejeje. Al pricipio puede ser duro, pero ya verás como en nada ya te adaptas a la vida japonesa! Hasta ya viviste tu primer terremoto.

    Me uno también a Sara y Joan en darte las gracias de pensar en nuestros ojos, jejeje.

    Besos!!

    ResponderEliminar
  4. Sí que se lee mucho mejor, ta muy chula la página!!!
    El piso muy bonito, ahora toca ir al Ikea japonés pa amueblarlo.
    Lo que dices de los extranjeros no me sorprende, en todas las casas cuecen habas....
    Tú tranquilo,que el tiempo pasa volando, te lo digo por propia experiencia, y eso que no me quejo que yo vivo en España.
    Besinos, nos vemos en diciembre!!
    La Maru

    ResponderEliminar
  5. ¡Coño! ¿Dónde está la cama?
    Y, ¿podrías poner una foto de la puerta?, me deja un poco descolocado la imagen esa.
    ¡¡Ánimo!! Que no pasa na' y te lo dice uno que vive a 700Km de casa en un sitio que es el antagónico de Asturias.

    Un abrazo
    Fernando

    ResponderEliminar
  6. Gracias por el cambio de look....ahora puedo leerte a una distancia prudencial ( para mi apéndice nasal) de la pantalla. No te daré collejas virtuales porque no duelen....pero ya te empiezo a "ver" con otra cara, primo, y eso me alegra!!! La casa me parece maravillosa: poco que limpiar, y además NO HAY PLANCHA!!!! estupendo!! sería un sueño pa mí!!.
    Estamos deseando saber ma´s de tí..así que no enfríes el teclado y tennos al corriente.
    (El terremoto a lo mejor sirvió de colleja???) DISFRUTA!!!!!

    Muchos besos desde Xixón.

    ResponderEliminar
  7. Muy chulo el diseño nuevo tío, y para los que no estén contentos del todo "readability" es la solución.

    y tío yo el piso lo veo muy chuulo, ha molao la panorámica, y ahora despacio despacio a poner cosas, como dice Joan, mientras haya un lugar para caerse muerto...

    Y también coincido nene, hay que pensar en positivo, si no atraes cosas chungas. No por suerte, sino porque la vida es en gran medida como la vemos nosotros. :)

    Y ya esta bien de consejos que ya sabes tu bastante. Solo comentar que te echamos mucho de menos y que las salidas a emborracharse no son lo mismo sin ti ;) abrazote gordo desde Oviedo

    ResponderEliminar
  8. ¡Vaya pisazo, colega!Igualito al de Cristiano Ronaldo en La Moraleja ;).

    Ánimo con todo, que ya sabes que ésta es la parte más dificil. Luego, cuando te acostumbres, pones el poster de Amelie, unas velas perfumadas, y ya tienes montado el nidito de amor. Sólo recordarte que las Japonesas no suelen cumplir criterios, ya sabes :D

    Y no te creas que por aquí se está tan bien. Dentro de poco vamos a tener que pagar por trabajar, y las pensiones van a ser un recuerdo histórico en la enciclopedia Larousse, junto a "Pascua, isla de".

    Te echamos mucho de menos. Cuídate y demuéstrales a los japoneses como se hacen las cosas en Asturias (menos en el tema laboral. Y universitario. Y político. Bueno, no les enseñes nada, ya tienen bastante con el Tsunami)

    ¡Un abrazo!

    Mario

    ResponderEliminar