domingo, 10 de febrero de 2013

...come queso

Ya lo he comentado en otras ocasiones en este blog y en persona sobre todo estas navidades, así que muchos ya sabéis que una de las cosas que más echo de menos en este país es el queso. Es difícil encontrar buen queso y mucho menos a un precio razonable. Normalmente lo que se suele encontrar es queso tipo tranchetes, cremoso de untar, cheddar… pero el queso curado es casi imposible de comprar y si se encuentra, es bastante caro. También se puede encontrar queso azul, el que yo compro alguna vez es danés. Sin embargo, hoy quiero poner una foto de una rareza, algo que he visto nada más que una vez.


Pues sí, se trata de queso Cabrales (izquierda) y queso de Valdeón (derecha), ah, y blanquita (¿dónde habrá dejado a Trillo?). Una de las cosas que encuentro más interesantes es ir de vez en cuando a los supermercados, a la sección de comidas preparadas, frutería, pescadería o carnicería. En ocasiones es como entrar en un museo pero mejor porque en este caso a veces se pueden probar las obras. Hace unos cuantos meses, mientras estaba dando un paseo con un chico español que estuvo por aquí, le llevé a uno de los supermercados más interesantes y pijos de Sendai. Allí fue donde vimos estos dos quesos. Aquel día no compré pero estuve a punto de hacerlo unos días más tarde después de que la morriña me golpeara, pero ya no lo volví a encontrar. Eso sí, el precio no estaba nada mal, aunque ahí no se ve, el cabrales costaba 882 yenes los 100 gramos, lo que son 80€ el kilo más o menos (al cambio del momento, ahora sería un poco menos).  Teniendo en cuenta que el precio de un queso de Cabrales normal anda por los 15€ el kilo en Asturias (hablo de media, que alguien me corrija si no es así) creo que ya he encontrado el negocio. De momento me tengo que contentar con lo que me traje al volver de vacaciones de navidad.

Esta es una entrada corta, la primera de algunas que llevo pensando desde hace tiempo para ir enseñando algunas curiosidades que me encuentro por aquí. Hago esto porque la otra entrada que se me ocurre necesita de más tiempo para madurar y caer del guindo (que no de De Guindos).


Besos para ellas y abrazos para ellos.

6 comentarios:

  1. Ese planeta tiene que estar lleno de cosas raras, yo me iría siempre con la cámara en la mano a todas partes.
    Viendo lo que se habla por ahí de los precios de la fruta y demás, el cabrales no me parece tan caro.
    Un abrazo primo.

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  2. Ahí el problema del negocio es el volumen de queso, pero si te pones y negocias,...

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  3. Estas entradas del día a día son de las mejores. Corta pero intensa. Sobre todo si tienes buena imaginación olfativa. Soy de los que no aguantan algo más fuerte que el quesito.
    Venga, siendo que es corta, esta semana toca otra ¿no?
    ¡¡Un abrazo!!

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  4. A que presta encontrar eso, y nada menos que en Japón?? En Nueva York encontramos también Cabrales y queso La Peral (éste me sorprendió encontrarlo)Un besín y hasta pronto

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  5. Bueno, pues como en el Lidl, encuentras una comidita (o un vino, o una conserva, etc.) de Noséandestán, en un gesto valiente la pruebas, está la mar de rica, vas a por una caja... y desapareció por siempre jamás. NUNCA hay que dejar pasar la ocasión... que hay que pillarla por los pelos ¡y la pintan calva!
    Besicos faticos.
    Jorge y Sara

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  6. Estoy con Joan: me encantan las entradas del día a día.

    También me gustan las otras, pero mis preferidas son éstas. A ver si nos deleitas con otra en breves que ya sabes que tu club de fans es ansioso.

    Besos!!

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