viernes, 25 de julio de 2008

...asiste a la carbon (I)

En primer lugar, tengo que hacer una corrección de la entrada …pasa el fin de semana con otros asturianos, y es que los discursos de inauguración tuvieron lugar el lunes 14 por la mañana y no el domingo 13, como tengo escrito. Es que, después de una semana de congreso, uno ya no sabe ni lo que escribe.

El caso es que me estoy retrasando en esto de escribir. Mañana hará una semana que terminó la famosa conferencia y todavía no he puesto casi nada sobre ella.

Los dos primeros días de conferencia (lunes 14 y martes 15) fueron, en mi caso, los más intensos en cuanto a trabajo. Resulta que las charlas que más me interesaban las pusieron esos días, incluso me coincidieron unas cuantas en salones diferentes a la misma hora.

No es que yo tuviera mucho trabajo, ya que no tuve que dar ninguna charla, otra vez será. Pero, el lunes por la tarde tenía sesión de pósteres, es decir, tienes que condensar tu trabajo en un póster de 90x180 cm, el cual cuelgas en una pared durante dos horas para que la gente lo mire y pase de él. Yo mandé tres contribuciones de este tipo pero, a pesar de la organización japonesa, tuve que poner los tres el mismo día. Y por si fuera poco, además de mis pósteres, dos de mis compañeros habían enviado uno cada uno, y también los pusieron el mismo día. Así que teníamos cinco pósteres y nosotros éramos tres. Por suerte, pusieron juntos los dos de mis compañeros y dos de los míos, así que nos pudimos organizar. De todas maneras, a la vez que la sesión de pósteres se servía un pincheo, y la gente, hambrienta, lo único que hizo fue comer y beber. En parte, fue una suerte para mí, porque así no me hicieron ninguna pregunta. Además, había unas colas impresionantes para buscar la comida, por lo que no quedó mucho tiempo para ver los pósteres. Para que os hagáis una idea de cómo es eso de un póster, aquí os va una foto:

El de la derecha es mi jefe de aquí, Kim-sensei. El póster de la foto contenía un resumen del trabajo del año pasado.

Después de la sesión de pósteres, Fabián y yo nos juntamos a una gente de Alicante (con los que él estuvo trabajando durante tres años) y nos fuimos a tomar algo por ahí. De esto yo no tengo fotos, a ver si me las pasan. De todas maneras, tampoco tiene mucha historia, ya que nos volvimos pronto para el hotel. En mi caso, de nuevo, caminata de media hora hasta mi habitación.

Una de las cosas que más me llamaron la atención, a la vez que más me gustó del congreso, fue el poner caras a la gente que sólo conoces de haber leído sus artículos. A los futbolistas, a los actores, a los famosos en general, siempre los ves por la tele. Pero para ver a esta gente tienes que ir a un congreso de este tipo. Y esto enlaza con la anécdota del martes.

Después de otra mañana entre charla y charla, en uno de los descansos, ahora no recuerdo la hora, estábamos Tascón, Fabián y yo en el vestíbulo del hotel cuando llegó Harold W. Kroto. Por el nombre no creo que os suene a la mayor parte de vosotros, pero este tío ganó el premio Nobel de química en 1996, compartido con dos americanos, por el descubrimiento de los fullerenos, una especie de balón de fútbol que levantó muchas expectativas en su momento, pero si alguien quiere saber más sobre el tema, ya sabe, a buscar en google. Además de tener el Nobel, es todo un caballero de la reina, vamos, que es un Sir de la pérfida Albión. El caso es que Tascón le dijo que tenía una cosa para él, así que nos dejó allí a Fabián y a mí con Sir Kroto y esposa, sin saber qué decir. Menos mal que era una gente muy maja, la señora nos sacó conversación y todo, es más, según parece el hombre estuvo en Oviedo en dos o tres ocasiones, así que pudimos rellenar esos minutos en los que Tascón fue a buscar lo que tenía para él.

Del martes, poco más tengo para contar. Nos tomamos unas cervecillas con un alemán residente en Estados Unidos con el que Tascón y Fabián tenían que hablar de trabajo, pero al final hablamos hasta de fútbol. Por cierto, dijo que, aunque era alemán, le gustó que ganara España la eurocopa de fútbol. Supongo que lo diría por ser amable con nosotros.

De momento, esto es todo. Intentaré terminar pronto con la semana de la conferencia. Lo malo es que me faltan fotos, ya que era Fabián el que llevaba la cámara, y de los días que quedan hay alguna imagen que quizá merezca la pena enseñaros.

Besos para ellas y abrazos para ellos.

1 comentario:

  1. Primin japonesin!!!

    Vaya, pero si resulta que trabajas!!! Y a qué te dedicas??? Eres diseñador de carteles o azafata de congresos? Es que no me ha quedado muy claro, aunque creo que igual lo de azafata no, porque en la foto no vas en bikini (y que conste que nunca te haría el feo de decirte que un bikini te queda mal).

    Qué fuerte!! Conociste a un premio Nobel!! Jo, yo pensaba que la existencia de esa gente era una leyenda urbana. Son de carne y hueso como otros seres humanos? Tienen sentimientos como, algunos, seres humanos? Sienten dolor como casi todos los bichos que se mueven?

    Bueno tú, me piro a seguir con lo mío

    :P

    PD: Gracias por mandarlo a la Maru, a mi me daba una pereza... jijijijij, es lo que tiene tener hermanas pequeñas capullas

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