jueves, 27 de mayo de 2010

...busca una manzana

Me temo que ahora esto se va a volver un poco liado, ya que voy a tener que intercalar las entradas de las vacaciones en Reunión con lo que voy haciendo por aquí. Por lo menos espero tener tiempo para ir escribiendo todo y no olvidarme de las cosas.

Este fin de semana estuve en Cambridge. Tras haber estado en Oxford, creí conveniente seguir intentando culturizarme, pero me temo que al final no fue posible. Sin embargo, sí que visité algunas cosas interesantes, a pesar de que muchos de los college estaban cerrados total o parcialmente debido a que estamos en periodo de exámenes.

Cambridge está a algo menos de dos horas de donde vivo, así que el sábado me levanté más o menos temprano para poder llegar a una hora razonable allí. Esta ciudad está al norte de Londres, así que, como yo vivo al suroeste, tuve que circunvalar Londres durante un buen rato, ya que la capital se desparrama hasta una gran distancia del centro.

Un pequeño comentario sobre los aparcamientos en Inglaterra, continuación de lo que dije en la entrada sobre Windsor. Existe una modalidad de aparcamiento en las ciudades inglesas de cierto tamaño o relevancia, que es el Park and Ride. Básicamente son aparcamientos ligeramente alejados del centro de las ciudades donde se puede aparcar por un precio más o menos módico, e incluso gratis, y coger un autobús hacia el centro. La verdad es que para los viajeros en coche como yo, es bastante cómodo.

Una vez en Cambridge, me dirigí en primer lugar al Trinity College, ya que había leído que su biblioteca se podía visitar, pero en un periodo de tiempo bastante ajustado. Esta es la entrada al college.

Y esta es una imagen de uno de los patios interiores.

Este es el Great Court. Todos los años se celebra una carrera alrededor de este patio en la que se ha de completar el recorrido en el tiempo que le lleva al reloj de una de las torres tocar las 12 campanadas del mediodía (341 metros en menos de 43 segundos). Al parecer sólo tres hombres han sido capaces de tal proeza. La historia del primero de ellos quedó inmortalizada en la película Carros de Fuego, aunque en realidad no se filmó en este mismo patio.

En la capilla, bueno, en la antesala de la capilla de este college, se encuentra un memorial de los alumnos más distinguidos, y los más famosos tienen hasta su propia estatua.

De izquierda a derecha os he puesto las estatuas de Newton, quien no necesita presentación; Lord Tennyson, poeta del XIX y Francis Bacon, canciller de Inglaterra y filósofo, considerado uno de los padres del método científico.

Tras mostrar mis respetos, me acerqué hasta el principal objeto de mi visita a este college, la biblioteca, construida por alguien de quien estoy empezando a estar un poco harto, Christopher Wren, es que este hombre está en todos lados. El acceso a la biblioteca es bastante restringido ya que no permiten que haya mucha gente a la vez en su interior, donde no se permite sacar fotos. Se trata de una biblioteca en uso, por lo que había algunos estudiantes preparando sus exámenes. Aunque también exponen algunos libros de su colección, entre los que destaca la primera traducción impresa en inglés de la Biblia y un ejemplar de la primera edición de Principia, con notas manuscritas del propio Newton que sirvieron como correcciones para la segunda edición.

Como anécdota, en el exterior del college tienen plantado un manzano, aunque este es de 1954, por lo que no fue el que dio lugar a la leyenda del porrazo en la cabeza, pero aseguran que es un descendiente de uno de los árboles de su casa en Woolsthorpe en el condado de Lincolnshire. Al parecer la habitación de Newton daba hacia donde está plantado actualmente este árbol.

Tras culturizarme un poco, salí de este college y me dirigí a la iglesia de Great St Mary’s.

En sí misma, esta iglesia no me pareció que fuera algo sumamente especial, sin embargo, se podía subir a la torre y disfrutar de una buena vista sobre la ciudad.

Esta es una imagen de la que fue mi siguiente parada en mi visita, el King’s College, uno de los más conocidos e importantes. Aunque tenía bastantes cosas cerradas, la visita a la capilla, la cual se puede ver en primer plano (bueno, más bien en segundo o tercer plano) en esta imagen. Al parecer es una de las mejores representaciones del gótico perpendicular en Inglaterra… no me preguntéis que es esto. A mí lo que me llamó la atención es la falta de transepto, sin embargo, no sé si es una característica del estilo arquitectónico o es que esta capilla es especial. Además, en su interior, las capillas laterales estaban conectadas a la nave principal por pequeñas puertas, algo a lo que no estoy muy acostumbrado, ya que estas capillas suelen estar más abiertas. Por otro lado, para acceder a los bancos hay que pasar por debajo del órgano y por el medio del coro.

Esta imagen es una composición hecha por mí, así que no ha quedado muy bien ya que se distorsiona bastante la perspectiva y la sensación de perpendicularidad. Pero me pareció interesante ponerla, ya que da una idea del tamaño de la capilla. Y la siguiente también es una panorámica, en esta ocasión del patio delantero del mismo college.

Una de las partes más emblemáticas de Cambridge es la parte que da al río Cam (¿de dónde vendrá el nombre de la ciudad?). Esta zona recibe el nombre de The Backs, y es que la parte de atrás de varios de los college de la ciudad dan a este río. Alguno de ellos incluso tiene edificios a ambos lados del río, con terrenos a los que sólo se puede acceder si eres miembro del college. Como visitante también se puede acceder a algunas de las partes, en determinadas horas. El paseo a lo largo del río es bastante agradable, a pesar de que no se puede hacer de manera continua, ya que hay que vadear los canales laterales lo que se podría hacer por terrenos de los college, pero no siempre están abiertos.

Como se puede ver aquí, una de las actividades favoritas de los turistas es el punting. Esto viene a ser el darse un paseo en una de las barcas cuyo “remero” o timonel ha de llevar la barca con la ayuda de una pértiga de unos cuatro o cinco metros de largo, a ojo de mal cubero que soy yo. Se trata de ir pinchando en el fondo del río para impulsar la barca. Se puede alquilar la barca con o sin remero, y se nota la diferencia de los que lo hacen todo el día y los turistas amateur, sobre todo por las eses que van dando estos últimos. Muchos de los timoneles tienen pinta de ser estudiantes que hacen esto para sacarse algún dinerillo extra. Eso sí, la vestimenta no la cuidan mucho, ya que alguno parecía sacado de alguna película de pandilleros con sus pantalones cortos enseñando los calzoncillos, en lugar de la imagen romántica del timonel de góndola en Venecia.

Hablando de Venecia, al igual que en Oxford, aquí también tienen un Puente de los Suspiros, aunque en este caso sí que está sobre el agua.

Este puente pertenece al St John’s College, de cuya parte de atrás os pongo una imagen aquí.

Tengo que decir que aparentemente me colé en este college. Resulta que la parte de atrás estaba abierta sin más, así que entré directamente. Después de darme un paseo por los patios y la iglesia, los cuales no voy a poner aquí ya que son muy parecidos a los anteriores, llegué a la entrada que da hacia el centro de la ciudad, y entonces vi que había que pagar una entrada para poder visitarlo. Desde aquí mis disculpas, pero no tuve ganas de pagar después de haberlo visto y que tampoco me pareció de lo mejor.

Para terminar con la parte de The Backs, os pongo esta imagen del Mathematical Bridge, que pertenece al Queens’ College.

Por último me acerqué hasta el Peterhouse, también conocido como St Peter’s College, que es el college más antiguo de Cambridge, fundado en 1280. El caso es que este estaba cerrado completamente y además no queda ninguno de los edificios originales, así que no voy a poner ninguna foto aquí.

En realidad, como me pasé el día entero allí, vi más cosas, ya que la ciudad en sí está bastante bien. Paseé por el mercado de Market Place (valga la redundancia) y vi la fachada de algún que otro college más, pero creo que ya he puesto lo mejor de todo o por lo menos lo que a mi entender vale más la pena de lo que yo visité.

Besos para ellas y abrazos para ellos.

3 comentarios:

  1. ¡Muy buenas!
    Al final no te mojas y no eliges si Oxford o Cambridge?
    Por cierto, no pones fotos de cómo quedaste al final del descenso en Reunión? Vemos mucho paisaje y poco personaje!!!! Pero tú sigue contando.
    Besos para él desde Gijonín.

    ResponderEliminar
  2. Albertico, guapetón, me encanta tu estilo literario. Se lo estaba comentando ahora mismo a Jorge, pues estábamos juntos viendo las fotos de la entrada. Sigue contando cosas, por fa. Por cierto, coincido plenamente con María, nos gustaría verte de vez en cuando, entre tanto nativo. Si no quieres ponerlas al público, mándanolas por correo.
    Besicos faticos.
    Jorge y Sara

    ResponderEliminar
  3. Eso, que algunos sabemos que si hay fotos tuyas, al menos en Réunion. jeje
    Muy chulo cambridge, con tanto sol y jardines dan pocas ganas de ir a estudiar alli, al menos a ir a clase.
    Un abrazo desde Antsirabe.

    ResponderEliminar